jueves, 21 de enero de 2010

Glacial


Captura mi esencia y teletranspórtame lejos, más allá de Orión. Abstraigámonos en la constelación más difusa del hemisferio norte, subsistamos en Luyten.
Deshazme en matices de una escala de púrpuras con solo miradas. Llévame al Monte de las Ánimas por un rayo de luna, conponme el miserere y deletréame el nombre de quien colgó el mar de tus pestañas... Porque el subjetivismo se enmaraña con mis palabras antes de ser deslizadas sobre el papel, y son fusionados en un "tú" sin escepticismos.
Imprégname de terciopelo añil y erígeme una escalera al centro de la tierra, espiemos el rumbo de una carretera hasta la desdicha. Regálame una road movie sin designación y diluiré acuarelas para pintarte una aurora boreal mezclando rubíes y violáceos, como si fuera nuestro último anochecer.

Vamos a soñar despiertos hasta que caoticemos la autenticidad con el sueño.

domingo, 3 de enero de 2010

Epílogo. 09.

Se recostó sobre las náuseas acérrimas que inundaban sus entrañas al olor del turrón. Ascendían desde la boca del estómago hasta la garganta, acompañadas por suspiros del silencio adverso que destilaba su colección de villancicos. Dedicaba sonrisas a sus noches de leve misantropía, para abarcar fragmentos de segundos y tejerlos a su rostro, como si fuera una modelo anoréxica desfilando exultante sobre la pasarela. Improvisó el guión de su propia parodia mordiéndose los labios, con la ambición de quebrarlo en mil y un pedazos, tratándose de aquel borrador que nunca enorgullecía a su progenitor. Licuando entre el humo del tabaco palabras que nunca fueron pronunciadas y transpirando bajo la lengua términos inconclusos antes de excarcelarlos en trémulas bocanadas al aire.
Quería entonar una nana en clave de fa para la llave de la consciencia, y dormirla bajo una copa de Bourbon. Crear el exceso entre los excesos. Descubrirlo después.